El Consejo de Europa alerta a Polonia contra la reintroducción de la pena de muerte
El PiS, vencedor de las elecciones, pidió en la oposición su restauración
El Consejo de Europa, órgano encargado de velar por los Derechos Humanos en el continente, alertó en la tarde de este lunes a los vencedores en las elecciones de Polonia del domingo, el centro-derecha del partido conservador Ley y Justicia (PiS) y los liberales de la Plataforma Cívica (PO), del peligro que supondría la reintroducción de la pena de muerte en el país. Según el Consejo, esto supondría una brecha y la ruptura de los compromisos internacionales. También puntualizaron que un paso de este tipo amenazaría la pertenencia del país a la UE y violaría uno de los principales derechos fundamentales declarados por la UE.
Y es que Jaroslaw Kaczynski, el líder del Ley y Justicia, y su hermano Lech -que se presenta a las presidenciales del próximo día 9- han declarado en numerosas ocasiones antes de la campaña electoral su apoyo a la pena capital como un medio para luchar contra el crimen y la corrupción. Durante la campaña han procurado no comentar este polémico asunto, pero tampoco se han echado atrás.
Con los socialistas de la gubernamental Alianza de Izquierdas (SLD) del presidente Alexander Kwasniewski desplomados, el cambio es seguro en Polonia. Tras el PiS, con 152 escaños, se sitúa la liberal Plataforma Cívica (PO) con 133 escaños. Ambos grupos sumarían así 285 escaños de los 460 que tienen el Sejm (Cámara baja del Parlamento polaco) -54 escaños por encima de la mayoría absoluta.
El pasado año el partido ahora vencedor, PiS, entonces en la oposición, presentó una moción en el Parlamento para la restauración de la pena de muerte como medida tras una serie de asesinatos, pero perdió la votación. El asunto no fue tratado directamente durante la campaña electoral y tampoco nadie ha declarado si se buscará una modificación en la ley una vez en el Gobierno.
"En un asunto serio como este, primero se debería convocar un referéndum. Cancelar la ratificación de la Convención Europea de Derechos Humanos pondría en cuestión la pertenencia de Polonia al Consejo de Europa", señaló Andreas Gross, parlamentario suizo y miembro de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa.
Polonia, que se unió a la UE el 1 de mayo de 2004, eliminó la pena de muerte en 1997 parta adaptarse a los estándares de la UE. A pesar de que la pena de muerte formaba parte del código penal polaco, no había sido utilizada desde hacía mucho tiempo. La Comisión Europea también se ha pronunciado sobre el asunto, argumentando que la pena de muerte va contra los valores fundamentales que comparten todos los países europeos.
"La abolición de la pena de muerte es uno de los criterios para abrir las negociaciones con un país candidato. Si aún la tienen deben abolirla, de lo contrario no existe la negociación", señaló un portavoz de la Comisión Europea, Friso Roscam Abbing. Además añadió que reintroducir la pena capital supondría una gran brecha con el resto de Europa.
El último ejemplo de esta política europea es la exigencia que se le hizo a Turquía de prohibir la pena de muerte como parte d su objetivo de entrar a formar parte de la UE, paso que fue tomado por Ankara en 2002. Rusia es el único país europeo que aún no ha abolido formalmente la pena capital, gracias a una moratoria solicitada en 1996.
Este año Rusia volvió a proponer otra moratoria argumentando que aquellos que desarrollan actos terroristas son merecedores de tal castigo, algo que ha despertado un criticismo absoluto en el Consejo de Europa. Alrededor de 70 países a lo largo del globo aún tienen la pena de muerte legalizada, de los cuales Japón y EEUU son las únicas democracias que aún llevan a cabo ejecuciones.
26.09.2005
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